LA
GAYA CIENCIA
Edgardo
Rafael Malaspina Guerra
1
La
gaya ciencia (1882) es la obra más importante de Friedrich Nietzsche porque por
primera vez esboza en ella sus ideas sobre el eterno retorno, la muerte
de Dios, la voluntad de poder y el superhombre.
2
"Esta vida, tal como la vives ahora y
como la has vivido, deberías vivirla una e innumerables veces más; y no habrá
nada nuevo en ella, sino que habrán de volver a ti cada dolor y cada placer,
cada pensamiento y cada gemido, y todo lo que hay en la vida inefablemente
pequeño y grande, todo en el mismo orden e idéntica sucesión...Al eterno reloj
de arena de la existencia se le da la vuelta una y otra vez...".
3
¿No
habéis oído hablar de aquel loco que, con una linterna encendida en pleno día,
corría por la plaza y exclamaba continuamente: “! ¡Busco a Dios! ¡Busco a Dios!
¿Dónde está Dios? ¡Os lo voy a decir! ¡Nosotros lo hemos matado, vosotros y
yo!! ¡Dios ha muerto!
4
El
hombre es el creador de los valores y tiene el poder para invertirlos. No hay
un más allá que le dé sentido a la vida. A la misma hay que reafirmarla hasta
el punto de desear su eterno retorno.
5
La
soledad absoluta me parece cada vez mi fórmula esencial, mi pasión fundamental.
6
La
gaya ciencia supone una ciencia alegre, poética.
7
La
mayor parte de los hombres carecen de conciencia intelectual.
8
A
las personas vulgares todos los sentimientos nobles y generosos les parecen
faltos de utilidad práctica y, por ello, totalmente sospechosos.
9
Los
espíritus más fuertes y malvados son los que hasta ahora han contribuido en
mayor medida al progreso de la humanidad.
10
Los
impulsos malvados son en un grado elevado tan útiles, indispensables y
convenientes para la conservación de la especie como los buenos impulsos.
11
La
conciencia es la última y más tardía evolución de la vida orgánica, y por
consiguiente lo menos logrado y más frágil que hay en ella.
12
El
dolor pregunta siempre las razones, mientras que el placer se inclina a no
considerarse más que a sí mismo sin mirar más allá.
13
El
amor al prójimo es un impulso para adquirir una nueva propiedad.
14
El
veneno que mata a una naturaleza más débil constituye un tónico para el fuerte.
15
Tengo
efectivamente la costumbre de empezar la jornada haciéndome un orden del día
para buscar la forma de que me resulte soportable.
16
En
épocas de relajamiento la tragedia frecuenta las casas y recorre las calles,
surgen grandes amores y grandes odios, y sube brillante al cielo la llama del
conocimiento.
17
Vivir
quiere decir ser cruel e inexorable con todo lo que hay de débil y de
envejecido en nosotros, y no sólo n nosotros.
18
Tiberio
tal vez pudo haber pensado esto: La vida no es sino una larga muerte.
19
Para
el que tiene carencias la filosofía es una necesidad, en tanto que sostén, calmante,
medicamento, entrega, elevación, alejamiento de sí mismo. Para el que posee
riquezas la filosofía es un hermoso lujo.
20
La
relación entre la salud y la filosofía resulta seductora. Los filósofos si
caemos enfermos, nos entregamos en cuerpo y alma a la enfermedad, En todos los
extremos he sido yo mismo mi propio médico. La enfermedad inspira al filósofo.
21
Aún
espero la llegada de un filósofo médico, en el sentido excepcional de la
palabra, cuya tarea consistiría en estudiar el problema de la salud global de
un pueblo, de una época, de una raza, de la humanidad…
22
Un
filósofo que ha atravesado y no deja de atravesar muchos
estados de salud, ha pasado por muchas tantas filosofías.
23
Sólo el gran dolor es el libertador último
del espíritu.
24
Es una indecencia eso de que Dios está en
todas partes.
25
Hay en la generosidad el mismo grado de
egoísmo que en la venganza.
26
Tenemos muy poca estima a quien no posee ni
la facultad ni la voluntad de vengarse.
27
El animal tiene derechos como el hombre.
28
La memoria del hombre retiene mejor un
verso que un discurso. En la antigüedad se creyó que la oración rimada debía
llegar mejor al oído de los dioses.
29
La prosa no es sino una guerra ininterrumpida
con la forma poética.
30
Escribir es para mí una necesidad.
31
Dios ha muerto: pero los hombres son de tal
naturaleza, que, tal vez durante milenios, habrá cuevas donde seguirá
proyectándose su sombra.
32
La moral no es más que el instinto gregario
que se da en el individuo.
33
La oración fue inventada para esa clase de
individuos que son incapaces de pensar alguna vez por sí mismos.
34
Quien se sabe profundo, se esfuerza en ser
claro; quien quiere parecer profundo se esfuerza en ser oscuro.
35
Los pensamientos son las sombras de
nuestros sentimientos.
36
Pobres son los que no entienden su pobreza
voluntaria.
37
Pensador es quien sabe considerar las cosas
más sencillas de lo que son.
38
Sólo nos alaban nuestros semejantes.
39
Nada nos gusta tanto comunicar a los demás
como lo que lleva el sello del secreto con todo lo que esto implica.
40
No me haría una casa (¡y tengo la suerte de
no poseerla!). Pero si no tuviera más remedio, me la haría como algunos
romanos: a la orilla del mar: puede que tenga afinidades secretas con ese
hermoso monstruo.
41
No avergonzarse de uno mismo es ser libre.
42
Lo que nos sucede redunda constantemente en
nuestro beneficio, sea lo que sea.
43
La muerte y el silencio de la muerte
constituyen la única certeza. Es un futuro común.
44
En nuestras ciudades faltan lugares
espaciosos, silenciosos y vastos, dedicados a la meditación.
45
El secreto para cultivar la existencia más
fecunda y más gozosa consiste en ¡vivir peligrosamente!!Construid vuestras
ciudades al pie del Vesubio!
46
Estoy agradecido a mi lamentable salud,
como a todo lo que tengo de imperfecto, pues me ofrece cien puertas falsas para
escapar de las costumbres duraderas.
47
El hombre superior se vuelve a un tiempo
más feliz y más desdichado.
48
Conozco mejor la vida por haber estado tan
a menudo a punto de perderla.
49
En el dolor hay tanta sabiduría como en el
placer.
50
Hemos de aprender a vivir también con una
energía disminuida; en cuanto el dolor da la señal de alarma.
51
A quienes buscamos el conocimiento nos está
permitido ver la vida como un experimento.
52
Una pérdida es una ocasión más de adquirir
fuerza.
53
Nuestro sufrimiento más profundo y personal
resulta incomprensible e inaccesible a casi todos los demás.
54
La dicha y la desgracia son hermanas
gemelas.
55
¡Vive escondido, a fin de que puedas vivir
para ti! ¡Vive ignorando lo que a tu época parece más importante!
56
La convicción no es admisible en la
ciencia.
57
La vida, la naturaleza y la historia son amorales.
58
La creencia es anhelada con más urgencia cuando
falta la voluntad, pues la voluntad como pasión de mando, representa el signo
distintivo de la soberanía y de la fuerza.
59
El
fanatismo es la única “fuerza de voluntad” a la que pueden tener acceso los
débiles y los inseguros.
60
Un
problema está casi siempre resuelto cuando se ha esquematizado.
61
La
conciencia no es más que una red de vínculos entre los hombres.
62
Lo
conocido es lo habitual, y lo habitual es lo más difícil de reconocer.
63
Un
hombre que ama a una mujer se convierte en esclavo.
64
La
voluntad de tener acaba cuando se tiene la posesión.
65
Estoy
acostumbrado a pensar al aire libre, andando, saltando, escalando, sobre todo
en montes solitarios o muy cerca del mar.
66
Cualquier
oficio, aunque tenga un suelo de oro, tiene también un techo de plomo. Se llega
dominar un oficio a precio de ser víctima de él.
67
Para
un espíritu piadoso nunca se está solo, este último descubrimiento lo hemos
hecho nosotros, los ateos.
68
Todo
arte, toda filosofía pueden ser considerados como medios a un tiempo saludables
y auxiliares al servicio de la vida.
69
La
lógica tranquiliza, da confianza.
70
El
reino de la justicia y de la concordia es el reino de la mediocridad más
profunda.
71
Cuando
se escribe, no se pretende sólo ser entendido, sino también no serlo.
72
Un
espíritu alerta prefiere vivir libre con una comida frugal, a vivir dependiente
y con el vientre lleno.
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