FILOSOFÍA

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FILOSOFÍA

sábado, 14 de enero de 2017

FILOSOFÍA ANIMAL

FILOSOFÍA ANIMAL

Edgardo Rafael Malaspina Guerra (Universidad Rómulo Gallegos, Venezuela)

Nuestra relación con los animales es extraordinariamente contradictoria, porque si Dios creó al hombre y a los animales, entonces somos familia. Esta contradicción es bien clara cuando abordamos las posiciones de dos de las grandes religiones :en  el judaísmo, del cual proviene el cristianismo, se afirma que Dios creó a los animales para que el hombre se los comiera (“Y toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra…les será para comer”); mientras que en el hinduismo ese mandato bíblico es pecaminoso, precisamente porque hombres y animales somos hermanos (“Esos pecadores-los carnívoros-serán devorados por las mismas criaturas que han matado en este mundo”).

Se dice que el cerebro humano se desarrolló cuando empezamos a consumir proteína animal; entonces, vegetarianos y veganos pudieran estar contrariando a la naturaleza misma, aunque estoy convencido de que existen poderosas razones filosóficas y científicas para estar de acuerdo con sus posiciones. El respeto absoluto hacia el reino animal pudiera darse en un mundo con grandes transvaloraciones rayanas en lo nietzscheano, con cambios transcendentales de la agricultura para masivamente acceder a las proteínas vegetales. Pero eso sería insuficiente: los cambios tendrían que ser también gastronómicos y en general culturales para que  dejemos de comer carne, botemos nuestras chaquetas, carteras y correas de cuero; no asistamos al circo, a  las galleras, las corridas y a los toros coleados.
Por otro lado, cabe destacar que todos los adelantos farmacológicos que han permitido vencer muchas enfermedades se los debemos a los animales. Desde que Claude Bernard fundó la Medicina Experimental (Fisiopatología) ningún medicamento va a los humanos sin haber sido probado en animales. El maltrato al animal de laboratorio, que algunos dicen se fundamenta en el error de Descartes, quien consideró que no sentían dolor, ha sido tema sobre el cual se ha legislado, gracias a las organizaciones defensoras de los animales. Por lo visto, no podemos desprendernos de la gran ayuda que nos prestan los animales, por eso lo que procede es establecer reglas claras, humanas y éticas, para obtener esa ayuda.

Hablemos ahora del genoma humano y el de seis mamíferos: el chimpancé, el perro, la vaca, el gato el ratón y  la rata. Las coincidencias en el material genético de nosotros con el de  esos animales son tantas que no hay dudas en que tenemos un ancestro común. El aspecto físico y la conducta corroboran que los animales son nuestros familiares lejanos. No hay que ser muy listo para entenderlo. La ciencia no hace más que comprobar lo que el hombre primitivo supo instintivamente. Los fabulistas antiguos  sospecharon algo.  Hay gente  graciosa como los monos ,obediente como los perros, sigilosos como los gatos, bondadosas como las vacas; y, por supuesto, las hay también de proceder execrablemente ratonil y que llevan la impronta genética de las ratas y actúan como tales. Estos dos últimos especímenes  debemos aceptarlos también como nuestros hermanos aunque sea con un pañuelo en la nariz. Los hindúes ya lo hacen desde siglos: en el templo Karni Mata las ratas y ratones deambulan libremente entre bebederos, comederos y creyentes.

En fin, los animales son nuestros hermanos menores, como dijo un filósofo ruso. Sobran razones religiosa (Dios nos creó a todos) y científicas (teoría de la evolución, genomas, etc.) para no dudar de esa tesis.



jueves, 5 de enero de 2017

EL ORIGEN DE LA FAMILIA ,LA PROPIEDAD PRIVADA Y EL ESTADO.






SOBRE EL LIBRO DE FEDERICO ENGELS  EL ORIGEN DE LA FAMILIA ,LA PROPIEDAD PRIVADA  Y EL ESTADO.

Edgardo Rafael Malaspina Guerra 
Universidad Rómulo Gallegos (Venezuela)


     La sociedad humana actual es producto de un proceso evolutivo que se inicia desde su propio origen, y por lo  tanto nunca ha sido estática. La familia y el Estado tienen en común un motor que los une e impulsa hasta alcanzar su desarrollo actual: la propiedad privada.
 El Libro de Federico Engels “El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado” , escrito en  1884, arroja luz sobre los temas mencionados. Inicial y fundamentalmente ,Engels tomó como punto de partida para sus indagaciones las investigaciones  del arqueólogo y etnógrafo norteamericano Lewis Morgan (1818-1881), pero en ediciones posteriores anexó datos provenientes de otros estudiosos de la prehistoria, analizándolos desde la perspectiva marxista con su método del materialismo histórico.

Morgan estudió la vida de los indios norteamericanos y de algunos pueblos asiáticos y encontró coincidencia en la manera de definir sus parentescos. Concluyó que primitivamente la descendencia se establecía por línea materna antes de imponerse la paterna. Es decir, el parentesco, como manifestación de las relaciones sociales, es reflejo del nexo consanguíneo.
 Su tesis evolucionista la extrapoló a todo el género humano para establecer cinco tipos de familias: la consanguínea (incesto), la punalúa (del tipo hawaiano o del Rapto de las Sabinas), la sindiásmica (unión de un hombre y de una mujer sin cohabitación exclusiva), la patriarcal (un hombre con diversas esposas, con las que cohabita) y la monogamica. Morgan afirma que la sociedad humana evolucionó desde el salvajismo hasta la civilización con un estadio intermedio, denominado barbarie. Dentro de estos estadios se suceden 7 subestadios: Salvajismo, inferior (relacionado con la recolección), medio (Pesca y lenguaje) y alto (Arco y Flecha). Barbarie, baja (Cerámica), media (domesticación de animales y plantas en Europa y sistema de riego en América) y alto ( relacionado con la tenencia de armas y herramientas metálicas). Civilización, relacionada con el invento del alfabeto fonético y el uso de la escritura.
  El  libro de Morgan “La sociedad Primitiva”, publicado en 1877, es la base sobre la cual sustenta Engels sus investigaciones , hilvanadas en El origen de la familia, la propiedad privada y el Estado. En sólo dos meses escribió su obra y no sólo recurrió al escrito del norteamericano, sino que también empleó los borradores dejados por Marx sobre el tema (1880-1881), quien había leído el escrito de Morgan y pensaba publicar sus propios análisis.
  Engels entendió que Morgan, de manera independiente, descubrió el materialismo histórico, a través de la estructura social de los indios norteamericanos, datos que sirvieron para dilucidar algunos misterios de la historia antigua de Grecia , Roma y Alemania. Para lograr ese objetivo, Engels agregó nuevos datos con fundamentos económicos, ignorados por Morgan, y amplió nuestros conocimientos sobre las sociedades primitiva, esclava y feudal. Este conocimiento tiene que ver en primer lugar con el análisis de  las relaciones de producción antes del surgimiento del capitalismo.
 Engels estudia sistemáticamente, a la luz del materialismo histórico,  la familia humana en las diferentes formaciones socioeconómicas, el proceso de transformación de la sociedad primitiva y la aparición de la sociedad dividida en clases como consecuencia del surgimiento de la propiedad privada.  Explica también el filósofo alemán el origen y la esencia del Estado y supuso su inevitable  desaparición para dar paso a una sociedad sin clases: el comunismo.
 La historia de la familia como institución humana  es importante, según Engels, porque sirve para comprender la aparición y desarrollo de otras instituciones que conforman la estructura social. En la medida   que las fuerzas productivas se incrementan sobrevienen los cambios que fomentan la aparición de la propiedad privada. Los viejos y primitivos enlaces familiares desaparecen para dar paso a nuevas formas que dependen de las relaciones que impone la propiedad privada. Surgen las contradicciones de clases y la lucha entre ellas, cuyos frutos son la historia escrita hasta nuestros días.
Empleando el método del materialismo dialéctico, Engels sigue paso a paso el desarrollo de los distintos tipos de familia en dependencia de los distintos modos de producción. En los Albores de la humanidad los matrimonios fueron grupales, pasando por diferentes formas hasta llegar a la monogamia.

La base económica de la familia primitiva era la propiedad doméstica comunista, donde la mujer desempeñaba el papel fundamental.  Las mujeres dominantes pertenecían a una misma tribu,  mientras que los hombres provenían de distintos clanes. La generación se establecía por línea materna. El desarrollo de las fuerzas productivas disminuyó el poder de la mujer en las relaciones  económicas sociales. Con el surgimiento de la propiedad privada  el derecho materno desaparece para dar paso a la herencia por vía paterna. La familia patriarcal pasa por algunas formas intermedias hasta llegar a la forma actual basada en la monogamia. Pero este tipo de matrimonio, acota Engels, que simboliza la cúspide del progreso social no es el resultado del amor puro entre un hombre y unas mujer. Es más bien el sometimiento de un sexo por el otro, la contradicción, por causas económicas,  de los mismos. Entonces es un progreso social relativo ya que, como toda forma de progreso social, implica el bienestar de unos y el sufrimiento de otros. El matrimonio monógamo es la célula esencial de la sociedad civilizada, y a través de la cual podemos estudiar la naturaleza íntima y última   de los contrarios y sus contradicciones.
  Engels también criticó la familia burguesa contemporánea, cuyos ideólogos proclaman como el símbolo más alto de la moral. En realidad-afirma Engels- la base de este matrimonio es en muchas ocasiones el interés, donde el esposo a escondidas practica la poligamia  o visita los prostíbulos, mientras la mujer abandonada espera la ocasión de convertir a su conyugue legal en cornudo.
 Pero en la sociedad burguesa, sobre todo en las clases desposeídas como el proletariado, se encuentran matrimonios conformados sobre verdaderos sentimientos de amor y respeto.
 En análisis sobre la evolución de la familia permite a Engels preguntarse cuál será su transformación luego de la desaparición del capitalismo. El creía que vendrían nuevas generaciones de hombres que nunca comprarían a  una mujer con dinero, y de mujeres que no se entregarían a los hombres sino sólo por amor sincero, además no temerán las consecuencias económicas de  estrechar lazos amorosos con el hombre de su preferencia .
En el libro Engels demostró también que la propiedad privada no ha existido siempre, sino que surgió en una etapa determinada de la historia humana y en relación con el desarrollo de las fuerzas productivas.
El cambio de los medios de producción y el incremento de la productividad implicaron la división social del trabajo, y todo en su conjunto transformó las formas de la propiedad y las relaciones sociales. La propiedad colectiva primitiva estalla para dar paso a la propiedad privada, con cuya aparición surgen las clases con sus intereses económicos en pugna.
 La ganadería , la primera gran forma social de división del trabajo, permitió el intercambio  regular entre las tribus de  pastores con otras no pastorales. Aumentó la productividad laboral, se acumularon riquezas y apareció la esclavitud. Aquí tenemos la primera división de la sociedad en clases: la de los amos y la de los esclavos.la de los explotadores y los explotados.
La aparición de los oficios como formas laborales separadas de la agricultura es la segunda gran forma de división del trabajo con sus nuevas clases sociales para anexarse a la de los esclavos y libres. En la clase de estos últimos se ubican los hombres ricos y pobres.
Por último,  la tercera gran división del trabajo social  produjo un nuevo y peculiar estrato de gentes que intercambian lo que producen otros : la de los comerciantes, llamados injustamente por Marx “parasitos”.

 Engels demostró que en los primeros días remotos de la humanidad, para todos los pueblos, existió una propiedad social sobre los medios de producción.  La sociedad de entonces, conformada por gens y tribus, - sus células fundamentales- en determinado periodo de su primitivo desarrollo , no conoció la estratificación  por clases con sus consecuentes divisiones  del poder en explotadores y explotados.  Los pueblos no estaban separados de un poder público, como lo es el Estado.
 La propiedad comunista prehistórica era muy primitiva, desde luego, y se relacionaba con    el bajo nivel productivo del trabajo. He allí su Talón de Aquiles que la llevó a su desaparición.
 Con el crecimiento de la productividad del trabajo aparece la propiedad privada, la cual es la base de las diferentes formaciones sociales:  esclavismo, feudalismo y capitalismo. Todas con sus antagonismos provenientes de las clases sociales. La expresión más acabada de la propiedad privada es el capitalismo, pero también en su forma límite, por cuanto se convierte en un obstáculo para  el posterior progreso de la humanidad.
  Engels imaginaba que ese obstáculo sería superado por la revolución social del proletariado con la consecuente liquidación de la propiedad privada y el surgimiento de la propiedad comunista, según su interpretación dialéctica de la historia.
 En realidad, “El origen de la familia, la propiedad privada y el estado”, es la continuación lógica de algunos trabajo del propio autor , tales como el Manifiesto del Partido Comunista y el Anti-Duhing.
 El filósofo alemán demostró que el Estado es producto de las contradicciones internas de la sociedad primitiva, cuando surge la propiedad privada con la división en clases. Entonces, el Estado no es una creación divina como argumentaron príncipes y reyes para mantenerse en el poder. Tomando como ejemplo la historia antigua de los griegos, los romanos y los alemanes, Engels demostró, claramente,, que el Estado es una fuerza peculiar, aparentemente ubicada por encima de la sociedad,  que lleva la impronta de su desaparición debido a la lucha de clases. La primera función del Estado fue la de organizar a la población según el territorio, y no de acuerdo a sus relaciones familiares. La segunda consistió en crear una serie de instituciones públicas como manifestaciones de su poder, tales como el ejército, las cárceles y otros organismos coercitivos.  El Estado es el órgano de la clase social más robusta económicamente que ha alcanzado el poder político para someter a las clases más desposeídas.

 Al analizar a algunos Estados concretos, y en particular la naturaleza de la república democrática burguesa, Engels critica que se le pretenda a elevar por los apologistas del capitalismo a la máxima expresión de la democracia, cuando en realidad no es más que una manifestación inhumana del poder absoluto del dinero; y remata que mientras el capital conserve su poder no habrán libertades  reales para las clases trabajadoras.
 Por último,  Engels hace un pronóstico discutible a la luz de los acontecimientos históricos recientes: “Las clases desaparecerán de un modo tan inevitable como surgieron en su día. Con la desaparición de las clases desaparecerá inevitablemente el Estado. La sociedad, reorganizando de un modo nuevo la producción sobre la base de una asociación libre de productores iguales, enviará toda la máquina  del Estado al lugar que entonces le ha de corresponder: al museo de antigüedades, junto a la rueca y el hacha de bronce”.

 En conclusión, Engels acertadamente explica los orígenes del Estado a través de la transformación de la familia primitiva como consecuencia del surgimiento de la propiedad privada y la división de la sociedad en clases. Su exposición  es una brillante demostración del materialismo histórico. No obstante, lo concerniente a sus pronósticos(desaparición de las clases y el Estado, advenimiento del comunismo, etc) son  discutibles, por cuanto algunos acontecimientos  contemporáneos recientes nos muestran a través del fracaso del Socialismo Real, que la historia tiene senderos serpenteados . Tal vez por lo que alguna vez afirmó Lénin de que la práctica es más rica y complicada que los libros y que el hombre nuevo surgirá en un periodo que puede sobrepasar los mil años a partir de la Revolución Bolchevique. Afirmación que hizo el fundador de la URSS para frenar a los fanáticos y soñadores, pronosticadores de una sociedad armoniosa, conformada con gente buena, laboriosa y justa;  posible en un tiempo muy breve. Puro idealismo.

 La explicación de que estos cambios no sobrevinieron como supuso Engels puede encontrarse en el campo de la filosofía: algunos estudiosos plantean que el hombre nuevo no puede aparecer , mientras no entendamos qué es en realidad el hombre, así sin adjetivos.

miércoles, 4 de enero de 2017



EL OCASO DE LOS IDOLOS

Edgardo Rafael Malaspina Guerra
Universidad Rómulo Gallegos (Venezuela)
1
Nietzsche escribe con odio contra la religión, pero especialmente contra el cristianismo. El ocaso de los ídolos es el fin de las verdades que precedieron al autor. El hombre busca una mentira que toma por verdad porque la vida es dura y necesita de un cuento de hadas para que la existencia sea más tolerable. “Creer en la inmortalidad del alma es una cobardía que reconforta”, decía Chejov. Dios niega los instintos naturales porque todo lo vigila, lo premia y lo castiga. La moral es contraria a la esencia de la vida. Cuando el hombre busca el conocimiento está matando a Dios. La naturaleza inventó el placer sexual para perpetuar la especie; pero la especie humana inventó los anticonceptivos y con ese invento burló a la naturaleza, a Dios. Nietzsche dice que el hombre mata a Dios para el mismo convertirse en Dios; y eso es cierto: cuando el hombre clona a otro ser le ha quitado una potestad que sólo pertenece a Dios: la de crear vida. Ahora el hombre también es Dios porque puede crear vida a través de la clonación. Cuando el Dios del cielo muere es porque es sustituido por muchos Dioses en la tierra. El difícil reconocer estas verdades. Se necesita mucha valentía. Un viejo profesor me comentaba que desprenderse de los dogmas religiosos (un ídolo de la caverna de Francis Bacon) es como desgarrarse el pecho.
2
Cuando se masifica la educación, la misma pierde calidad porque produce muchos malos estudiantes y pocos buenos profesores. Además, es claro que se quiere egresar profesionales aprovechables políticamente. La educación debe ser un proceso ejecutado con calma para enseñar a pensar, hablar y escribir. “…Se requieren educadores que estén a su vez educados, espíritus superiores…que estén a la altura requerida en todo momento y que den prueba de ello cuando hablen y guarden silencio…”  “…Educación superior y gran número son dos cosas contradictorias  a priori entre sí”.
3
El lenguaje tergiversa las verdades, por eso es necesario guardar silencio y meditar.
4
 Las ideas más brillantes se le ocurrieron a Nietzsche mientras caminaba, por eso escribe: “Solo tienen valor los pensamientos que nos vienen mientras andamos”. El alguna parte decía un especialista ruso que caminar produce tres efectos positivos: salud, buen humor y buenos pensamientos.
5
Nietzsche actúa como sicólogo o como siquiatra, lo que demuestra que la filosofía al ramificarse en otras disciplinas deja de serlo. Entonces, la filosofía versa sobre los temas que no conocemos, y al conocerlos ya no será filosofía. La filosofía es hacerse preguntas que no tiene respuestas en el momento que nos las hacemos. La filosofía viene también del sufrimiento, por eso Chejov afirmó: “Cuando la humanidad aprenda verdaderamente  a aliviar sus sufrimientos con pastillas y gotas .dejará a un lado fatalmente la religión y la filosofía”.
6
Nietzsche habla como sicólogo a siquiatra cuando se refiere a Sócrates, y cree que el griego filosofaba porque era bien feo. Hasta piensa que sus rasgos físicos escondían una personalidad criminal. Constantemente, Nietzsche se define como fisiólogo, pero exactamente es frenólogo  como Franz Joseph Gall (las protuberancias del cráneo se asocian a las funciones afectivas e intelectuales) y como  Jonh Kaspar (los rasgos faciales se relacionan con el carácter y la actividad mental). En última instancia era lambrosiano.
7
Nietzsche sutilmente da entender que Sócrates estaba loco (cuando se juntan se conocen): “No olvidemos tampoco de sus alucinaciones acústicas, a las que, con el nombre de daimon de Sócrates, se le ha dado una interpretación religiosa”.
8
La Eternidad es un espacio desconocido, pero que en todo caso pertenece a los aposentos de Dios. ¿Qué es la eternidad? Uno siempre piensa que la eternidad es algo inmenso. Dostoievski piensa distinto. Hay que recordar la conversación entre Roskolnikov y Svidrigailov en Crimen y castigo. Svidrigailov rechaza el concepto de eternidad como algo extenso o inmenso de esta manera: “¿Por qué tiene que ser la eternidad necesariamente algo grande, espacioso e ilimitado? Imagínese  de repente, un cuartucho como un baño sauna de las que tienen los campesinos rusos, con hollín, y en todos los rincones lleno de telaraña,  y he allí toda  la eternidad”.
9
Algunos dicen por allí que la eternidad ya es un espacio al alcance de todos. Ya no pasan a la eternidad solamente los grandes, los héroes y los semidioses porque la misma está al alcance de todos: internet la ha popularizado, la ha masificado. Basta con escribir algo en la red y colocar una foto para que se multiplique y difunda tu nombre. Lo viral está asociado a lo eterno. Prueba de que la eternidad se alcanza por ese medio es que los difamados que intentan borrar la difamación para limpiar su nombre, reciben una sola respuesta de los directores de las redes sociales: es imposible, los borras aquí y aparece por allá.
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Dios ha muerto también en el terreno de la eternidad. El hombre la ha alcanzado con la tecnología de comunicaciones.
11
La historia del hombre es su progreso ascendente por la espiral del conocimiento; y eso no es más que el cumplimiento de un mandato bíblico: “Entonces dijo Dios: hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza…” (Génesis 1:26).
Dios creó al hombre para que fuera tan poderoso como Él.
El hombre creó a Dios como una meta que debía alcanzar a largo plazo y ser poderoso (Dios) según ese sueño.
Dios es la esperanza del hombre, su conciencia, su futuro. Ya Voltaire lo dijo: “Si no existe Dios, hay que crearlo”.
12
Nietzsche dice: “Sólo se sigue siendo joven cuando el alma no descansa, cuando no buscamos la paz”. Es decir: el ocio es la madre de todos los vicios. Trabajar hasta el último minuto es tener salud. Nunca ser un pensionado ocioso. Nunca jubilarnos. Morir haciendo lo que nos gusta.
13
Lo apolíneo (la vida seria, el estudio, la ciencia) y lo dionisíaco (los goces, la alegría, la embriaguez) se pierde con Sócrates y Platón. El cristianismo promete una vida más allá de la muerte. No vivimos la vida real, sino que esperamos otra que en realidad es inexistente, pura mentira religiosa. La “cosa en sí” (lo que no conocemos) de Kant para negar el conocimiento es la afirmación del misterio de Dios, y la negación del camino del hombre hacia la verdad. El conocimiento es descubrir la cosa en sí. Con la desaparición de la cosa en sí a través del conocimiento,  desaparece Dios.
Al negar las mentiras del cristianismo podemos caer en el nihilismo, el cual se supera siguiendo la moral natural de los instintos. Hay que regresar a la dialéctica de Apolo y Dionisio.
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Sólo existimos. No hay ninguna finalidad en nuestra existencia.
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Marx dijo que la religión es el opio de los pueblos. Nietzsche dice que hay dos grandes narcóticos: el alcohol y el cristianismo.
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En la evolución los débiles superan a los fuertes en número y en ingenio. Los que tiene fortaleza desprecian el ingenio. El ingenio es la previsión, la paciencia, la astucia, el disimulo, el dominio de sí mismo y el mimetismo.
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Las enfermedades son efectos de la decadencia, no causas de ellas, afirma Nietzsche. Hay un pasaje que tal vez tomaron los fascistas, los nacionalsocialistas hitlerianos y el propio Mengele: “El enfermo es un parásito de la sociedad. Es indecoroso seguir viviendo cuando se llega a cierto estado” (¿sugería la eutanasia?), y prosigue: “Seguir vegetando dependiendo cobardemente de los médicos y medicinas, una vez perdido el sentido de la vida, el derecho a vivir, debiera ser algo que produjese desprecio a la sociedad”. Luego sugiere que los médicos deben dejar de lado las recetas y experimentar dosis de asco hacia sus pacientes, y remata con algo parecido a la eugenesia practicada por los fascistas alemanes: “Hay que crear en el médico una nueva responsabilidad ante todos aquellos en que el interés supremo de la vida ascendente exija que se aplaste y se elimine sin contemplaciones la vida degenerante; por ejemplo, en lo relativo al derecho de engendrar, a nacer, a vivir…”

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“…cualquier pobre diablo siente placer injuriando, porque esto le produce una pequeña borrachera de poder”.
“Si yo pertenezco a la canalla y soy un canalla, tú deberías pertenecer a ella y serlo también: con esta lógica se hace la revolución”.
“El quejarse no sirve absolutamente de nada: es algo que procede de la debilidad. No hay una gran diferencia entre atribuir nuestro malestar a otros como hace el socialista o atribuírselos a nosotros mismos, como hace el cristiano”.
“…odio también a la revolución, porque esta es la manifestación, en el ámbito de la historia universal, de esa duplicidad de idealista y de chusma”.
Para Nietzsche la doctrina de la igualdad es el fin de la justicia porque no se debe igualar los desiguales.
19
En este libro Nietzsche habla de sus preferencias literarias. “El aforismo y la sentencia…son las formas de la eternidad. Ambiciono decir en diez frases lo que todos los demás  dicen en un libro”.

Sus influencias para la escritura provienen de Salustio, Horacio, Túcidides y reconoce en Dostoievski al psicólogo que le enseñó algo.

LA FILOSOFÍA DE HOUSE

LA FILOSOFÍA DE HOUSE

Edgardo Rafael Malaspina Guerra.

Universidad Rómulo Gallegos (Venezuela)
1

La serie televisiva del  Dr. House  está diseñada bajo los parámetros de muchas corrientes filosóficas, según se desprende del libro escrito por William Irwin y Henry Jacoby, y  cuyo nombre lleva este artículo. Y no es casualidad, porque el médico es, entre todos los profesionales, el más cercano a la Filosofía. Hipócrates así lo entendió cuando afirmaba que “…No hay una gran diferencia entre la Medicina y la Filosofía”. Aristóteles también confirmó está relación: “…El filósofo debería comenzar por estudiar      Medicina, y el médico debería terminar por estudiar Filosofía…”. El  médico es testigo de primera línea del sufrimiento y la muerte, los verdaderos motores de la Filosofía. Letamendi  lo constata: “Quien no se conmueve ante el dolor humano no tiene entrañas. Quien no filosofa ante un cadáver no tiene entendimiento”.
House como Sócrates  y Sherlok Holmes le intrigan los enigmas y trata de resolverlos  eludiendo el  principio de la navaja de Occam : la explicación más sencilla es por lo general la más correcta. House es socrático porque lleva “una vida de examen”; y es también aristotélico al tratar de encontrar en todo una razón. House es ateo (“si Dios existe, debe darme una evidencia”): “lo que me resulta difícil de creer es el concepto general de creencia: la fe no se basa ni en la lógica ni en la experiencia”,  “por lo general los argumentos racionales  no surten efecto en la gente religiosa, de lo contrario, no habría nadie religioso”, dice, y remata que los religiosos al cruzar una calle confían más  en mirar a ambos lados antes de ponerse en manos de Dios. House tampoco  cree en una vida después de la muerte (“No hay más allá, sólo hay esto”) y las visiones que tienen los que han experimentado una muerte clínica (Experiencias cercanas a la muerte) las explica por la falta de oxígeno, las endorfinas y la serotonina. Como los nihilistas House piensa que la vida no tiene sentido y “lo único que cuenta es lo que hacemos aquí”. House es seguidor de Bertrand Russel porque cultiva la Filosofía no por las respuestas definitivas que demos a las preguntas, imposibles de corroborar, sino por las preguntas en sí mismas, las cuales enriquecen la imaginación intelectual y minan la seguridad dogmática que obnubilan la mente.
House es existencialista como  Jean-Paul Sartre y considera las relaciones sociales un verdadero infierno. Sus colegas y los pacientes son útiles para sus indagaciones diagnósticas; sin embargo, con frecuencia le irritan mucho y por eso suele maltratarlos. Los otros son una enfermedad y una necesidad. Pero los demás con sus actuaciones antagónicas modelan nuestra personalidad y determinan nuestro potencial como individuos.
2

Algunos dicen que House está inspirado en el poeta francés Cyrano de Bergerac (1619-1655) por su carácter pugnaz e irrespetuoso hacia todo tipo de instituciones de la sociedad. No obstante, es claro que con la primera letra del apellido de House  se le quiso asociar con el detective Holmes (Sherlok), el personaje de Conan Doyle, inspirado a su vez en Joseph Bell, un médico que hacía certeros análisis diagnósticos  con sólo ver al paciente .
Las escenas de la serie se desarrollan según una técnica de filmación denominada “walk-and-talk”(caminar y hablar) para indicar dinamismo y premura en el tiempo. Esa manera de conversar es copiada, según creo, de la Escuela Peripatética (itinerante) de Aristóteles, quien enseñaba a sus discípulos mientras paseaba en un jardín. House es un provocador como Nietzsche y trata siempre de enfrentar las normas y reglas como el superhombre del filósofo alemán. House es distinto a todos los demás médicos del hospital: tiene una cojera, que en realidad  más que un defecto físico es un encanto; no tiene sus modales ni se viste con bata blanca. Es un asceta que profesa la abnegación. No busca el éxito material. Sus pantalones son sencillos y viaja en motocicleta. House sufre una enfermedad que le provoca dolor en una pierna. Es un padecimiento psicosomático que lo hace mejor, lo sublima, según los preceptos freudianos. El filósofo alemán Georg Simmel decía  que la elevación esencial de nuestro ser se logra por medio del dolor físico o espiritual; y por eso el médico y escritor ruso Antón Chejov afirmaba que no había necesidad de combatirlo porque  su desaparición podría ser el fin de la religión y la filosofía. El dolor de House y su forma de resolver problemas difíciles conllevan a nuestra empatía, similar a la que sentimos por Edipo y Prometeo.
 En el proceso diagnóstico House actúa según el principio del ensayo y el error y en contra de las enseñanzas de las facultades de Medicina. Todos nos equivocamos.El error existe y si lo cometes “ve a casa, bebe algunos tragos, duerme y levántate mañana; haz todo de nuevo pero hazlo mejor. Si necesitas  absolución  ve con un sacerdote u ofrece limosna a los pobres. Cualquier ritual  que te consuele”. Y es cierto, porque  seguir actuando  como un buen médico es mejor que soportar una determinada dosis de culpa por diagnósticos errados.
3
El método diagnóstico de House es de la abducción o de “razonar hacia atrás” recurriendo a conjeturas. House, a veces, puede concluir con ese tipo de razonamientos, que alguien es infiel, por ejemplo. Su equipo de médicos lo acompaña para en cada caso  plantear, discutir y rechazar las posibles hipótesis sobre un pizarrón hasta llegar a una solución. Primero clasifica los síntomas para explicar la enfermedad. Aparecen varios posibles diagnósticos, los cuales se reducen a unos pocos al discutirlos uno a uno. Se hacen pruebas de laboratorio y el campo de probabilidades se limita para dar paso a la respuesta correcta.
House recurre  al principio de la “razón suficiente”; es decir, hay siempre una explicación racional para cada suceso, aunque no la sepamos. Las enfermedades y la muerte tienen una causa, una razón; y las curaciones también. House rechaza el principio de la “navaja de Occam”(la explicación más sencilla es siempre la mejor), porque “sostener que una cigüeña es responsable de que aparezca un bebe es más sencillo que citar el complejo proceso de reproducción biológica, pero eso no significa que la hipótesis de la cigüeña sea mejor”. La verdad puede estar muy enmascarada; y para eso existe la ciencia médica: para descubrirla aunque esté muy oculta: “lo raro funciona para mí. Lo extraño es bueno. Lo común tiene cientos de explicaciones. Lo raro difícilmente tiene una”.
House es prepotente y cree tener constantemente la razón. Cuando le reclaman esta actitud, responde que le es difícil trabajar suponiendo lo contrario. El lema de “todos mienten” significa que la gente no sabe hablar de manera apropiada en determinada situación: “Los pacientes y los médicos a menudo se hacen un idea con antelación cuando en realidad no saben lo que está pasando  y el resultado es que en verdad no saben lo que es importante”.
El comportamiento de House parece estar guiado por la práctica zen, corriente del budismo que propone prestar atención a los temas sencillos de cada día. Así estaremos mejor preparados para enfrentar los problemas difíciles.
 House  busca la forma más  correcta de actuar, bajo el lema del proverbio zen que recomienda meditar y consagrarse  totalmente cada día, como si el fuego ardiera en nuestros cabellos.
4

  Uno de los métodos diagnósticos de House es la interpretación de los sueños, a la manera de Freud, y más precisamente de   August Kekulé, el químico alemán, descubridor del anillo de benceno después de haber soñado con una culebra que se mordía la cola. House  toma un caso, y mientras se dedica a realizar otras cosas piensa en el mismo. Le da vueltas en su cabeza  y en un sueño puede encontrar la solución del problema y llegar a precisar la enfermedad que padece su paciente. La neurociencia acepta plenamente esta posibilidad por cuanto nuestras neuronas  no descansan mientras dormimos, fenómeno que se encaja   en el concepto de la plasticidad cerebral.
Como Sócrates, House insulta, ridiculiza e ironiza para llegar a la verdad. No se debe creer nada sin antes analizar detalladamente todas las evidencias. Cuando decimos que nuestra teoría es la mejor, nos estamos poniendo una venda en los ojos. Al reconocer nuestra ignorancia en un  tema y aceptar que no todo lo entendemos, estamos transitando por el camino hacia el razonamiento correcto. House le grita a un estudiante: “Eres un inútil. Pero al menos lo sabes”. “¿Sabes lo que es peor que un inútil? Inútil  e ignorante. No necesitamos aprender cómo es el mundo, sino cómo pensar a pesar de que nunca sepamos cómo es el mundo.
House es inmodesto y cuando le reclaman su falta de humildad, afirma que “la humildad es una cualidad importante, especialmente cuando te equivocas mucho”. Le espetan que se equivoca mucho, a lo responde :”Por supuesto, cuando se tiene razón, dudar de sí mismo no ayuda a nadie,¿verdad?.
House valora las críticas a su actuación médica, porque los desacuerdos indican que hay capacidad para desarrollar el pensamiento y poder discutir las teorías. Las contradicciones son el fundamento para llegar a un conocimiento exacto y razonado de las cosas. Para House, un médico que no exprese un sano escepticismo en relación con el estado actual de la medicina no sería más que un médico de cajero automático, recetando medicamentos según algunos lineamientos establecidos previamente. Las confrontaciones intelectuales duelen tanto como las físicas “porque ser agradable está sobrevalorado”.
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  House a veces peca de inmodestia como algunos grandes filósofos convencidos de su infabilidad . Yo soy quien te va a salvar la vida, le grita a un paciente. Cuando acierta en un diagnóstico vocifera: nunca debo dudar de mí mismo. En este sentido, House carece de la humildad, proclamada por el taoísmo, doctrina con la cual algunos lo identifican. La autopromoción no da brillo, dicen los taoístas. No obstante, el tao es el camino, y House trata de fraguarse su lugar apropiado en el universo; es decir, busca su sendero (tao) de manera espontánea, sin rebuscamientos.
Kant hablaba sobre nuestras actuaciones, las cuales deben ceñirse a ciertos criterios como si dependieran  de una ley universal de la naturaleza. Una acción moralmente correcta es aquella que todos aceptan y por lo tanto siguen. Sin embargo, cuando necesita ayudar a uno de sus pacientes, House rompe con el imperativo kantiano y miente para salvarlo. Un aforismo del tao justifica su comportamiento: los sabios no sienten debilidad por la moralidad institucionalizada. Esta última expresión explica  también la relación de House con sus subordinados,  a quienes considera insignificantes y sin importancia.
House es pesimista en el sentido filosófico del término: conoce demasiado la realidad con todas sus aristas; y esta realidad es dura, tan dura y difícil que no hay espacio para la relajación optimista: piensa mal y acertaras. Conoce el infierno y lo evitarás, parafraseando a Maquiavelo.
                  El principio hipocrático que guía las actuaciones los médicos es “primum non nocere”, es decir: primero no dañar, recomendar un tratamiento con mayores beneficios y con menos efectos secundarios y daños colaterales. Pero House es audaz y toma decisiones peligrosas: “Tomo riesgos y a veces los pacientes mueren .Pero no tomar riesgos hace que mueran más pacientes, así que supongo que mi mayor problema es que he sido dotado con la capacidad  matemática de hacer bien las cuentas”.
Ese es el House frío y calculador en busca de rescatar la salud de sus pacientes. Él está dispuesto a hacerles daño  y paradójicamente obtiene los mejores resultados. House rompe con todas las reglas y principios bioéticos, bajo los cuales nos manejamos los médicos.
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  Los pacientes  de House no obtienen lo que quieren, pero si lo que necesitan. A pesar de   la ética médica, House a veces actúa en contra de la voluntad de los pacientes, pero termina sus tratamientos de manera exitosa recurriendo al paternalismo, doctrina rechazada en la práctica  hospitalaria porque es el enfermo quien debe decidir su propio destino por inaceptable que sea para el equipo médico. House es el médico como debería ser en un mundo de fantasía, porque cada caso es resuelto felizmente. Él afirma: “si el fin no justifica los medios, entonces  ¿qué lo hace?”.
 Pero en la vida real la precisión diagnóstica es mucho más difícil y llena de muchas complicaciones con resultados lamentables, no pocas veces, sobre todo cuando se trata de enfermedades crónicas e incurables. En efecto, hay enfermos con patologías dolorosas y terminales que no quisieran seguir tratando sus males porque afectan su calidad de vida. Preferirían la eutanasia o esperar un desenlace fatal sin la intervención de los médicos.
Resulta interesante lo que piensa House sobre la eutanasia. Él se opone a ese método porque valora mucho la vida; y ningún dolor puede ser motivo para que un paciente la termine con sus propias manos. Esta posición de House es entendible porque él mismo sufre de fuertes dolores que lo obligan a consumir narcóticos; pero jamás piensa en el suicidio.
Pero House sigue el imperativo hipocrático de restablecer la salud y salvar vidas por encima de cualquier otro objetivo.
House es un utilitarista porque espera un resultado favorable en la resolución de un problema médico para concluir que su acción fue moralmente correcta. Ese utilitarismo hace que House audazmente aplique tratamientos de alto riesgo jugándose siempre a Rosalinda. Kant aconsejaba no mentir bajo ninguna circunstancia, incluso si la vida corre peligro. House, por el contrario, cree que mentir es a veces bueno cuando se trata de salvar vidas.
House, tal vez, no siempre hace las cosas de tal manera que sea una persona moralmente correcta. Es un virtuoso con defectos. Sus acciones son humanas, y por lo tanto no exentas de errores. Como dijo el poeta de Verdades Amargas: “Existe la virtud/ yo no lo niego/ pero siempre en conjunto defectuoso/ hay rasgos de virtud en el malvado/ y rasgos de maldad en el virtuoso”.
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El Dr. House es admirado porque es un personaje de ficción, pero probablemente en la vida real nadie soportaría sus excentricidades. Los excéntricos son modelos que representan la exclusión de la regla para hacer de nuestra vida algo más interesante. Sin ellos los días serían muy aburridos. En la Historia tenemos muchos ejemplos: Diógenes, el cínico, quiso vivir lo más natural posible y de manera muy ética: sin diferenciar la vida privada de la pública. Nos fascina leer sobre sus anécdotas  : vivir en una tinaja, actuar sin ninguna vergüenza, despreciar las cosas materiales, buscar a un hombre honesto con un candil en pleno día, rechazar la ayuda del propio Alejandro Magno, etc. Kropotkin, el anarquista ruso, cuando le ofrecieron un ministerio después del triunfo de los bolcheviques en 1917,  rechazó la propuesta  con el siguiente argumento: “Limpiar zapatos es más digno que ser ministro”. Entre nosotros, el escritor Argenis Rodríguez narra en sus memorias, con desparpajo y sin ningún tipo de vergüenza, sus actuaciones claramente no convencionales ante la sociedad. Una vez me dijo que orinar debería ser un acto muy natural por ser una necesidad fisiológica, y de inmediato lo hizo en plena calle. House, como Diógenes y otros excéntricos, subestima a los demás y no diferencia lo privado de lo público. Por eso toma su vicodina delante de todo el mundo, porque no le importa lo que los otros piensen. Los que respetan la moralidad convencional son educados pero no honestos, según House.
Los excéntricos , según el filósofo John Suart Mill, son necesarios por las ideas que aportan a la sociedad, por muy extravagantes que parezcan. Ellos son experimentos de la vida. Miller dice: “Aquel que permite que el mundo o su propia porción de él elija por él su plan de vida, no necesita de ninguna otra facultad que la que la da la imitación de los monos. Aquel que elige su plan  por sí mismo, emplea todas sus facultades…”. Los excéntricos actúan por nosotros, y por eso nos identificamos con ellos.
House tiene su propio plan, es original y no imita como los monos. House  no respeta las jerarquías, actúa a veces ilegalmente y en contra de la ética médica; sin embargo, creemos que es un hombre noble que mediante sus acciones irreverentes persigue lo mejor para sus pacientes. Es un genio que se expresa libremente con sus pensamientos y práctica. House se preocupa  más por la verdad que por tener razón. Es maniático y egocéntrico; y si tuviera virtud moral o fuese mejor persona no sería un mejor médico.


DIALÉCTICA DE LO REAL EN LA HISTORIA DE LA MEDICINA

                           UNIVERSIDAD SIMÓN BOLÍVAR

II SIMPOSIO INTERNACIONAL DE INVESTIGACIÓN FILOSÓFICA

DIALÉCTICA DE  LO REAL EN LA HISTORIA DE LA MEDICINA
Autor: Edgardo Rafael Malaspina Guerra
Universidad Rómulo Gallegos, San Juan de los Morros

 RESUMEN

Michael Foucault planteó  las diferentes interpretaciones otorgadas  a un mismo fenómeno patológico en épocas no muy distantes, según el desarrollo de la ciencia. El debate en torno a lo real en el escenario específico de la historia de la medicina es fácilmente extrapolable  al campo de la filosofía en general, en una relación de retroalimentación dialéctica. En efecto, lo real es el cristal por el cual vemos nuestro ser y nuestro  mundo convertido en realidad. Por lo tanto el concepto no es  único y  universal, es objetivo, pero también subjetivo; y en el panorama médico ha sido de mucha utilidad: los aforismos hipocráticos contienen  ideas  irrefutables de lo real- trasmitidas  a través de generaciones y aplicadas sin comprender su fatal e inexorable materialización-, impulsadoras de la medicina, que el progreso científico ha corroborado. Lo real, entonces, es una categoría netamente filosófica independientemente de la ciencia. El conocimiento médico  objetivo es real y es la fuente de la medicina actual basada en las evidencias; pero la medicina mágico-religiosa fue y es real para quien comulgue con ella: la psiconeuroinmunología es su manifestación más palpable y punto donde coinciden las visiones de lo real de un médico y la de un chaman. La neurosis y emociones como la tristeza y la depresión, padecimientos sin sustratos anatómicos-cosa en sí temporal-, conforman el  mundo de lo real del paciente, situación que corrobora la calidad subjetiva del concepto.

Palabras  claves: lo real-medicina-historia-filosofía


   Real es lo que tiene existencia verdadera y efectiva, según el Diccionario de la Lengua Española (1).Lo real es aquello que es inherente a una cosa. Se usa como lo opuesto a lo ilusorio, aparente, ideal o ficticio (2).   Lo real es el ser de las cosas en contraposición con el no ser (3).“El postulado para el conocimiento de la realidad de las cosas –dice Kant-exige una percepción; por consiguiente, una concepción acompañada de conciencia del objeto mismo cuya existencia ha de conocerse, pero es preciso también que este objeto concuerde con alguna percepción real según las analogías de la experiencia, las que manifiestan todo enlace  real en la experiencia posible” (4). En otras palabras lo real es la esencia misma de las cosas, mientras que la realidad es la manera de percibirla. Semejante apreciación hizo Lacan  cuando expresó que la realidad es el conjunto de los elementos reales.
A lo largo de la Historia de la Medicina podemos observar que lo real se equipara a la “cosa en sí” kantiana, la cual deja de serlo en la medida que la ciencia médica se desarrolla y se transforma en  “cosa para nosotros”, parafraseando a Lénin (5).
 Los diferentes teorías etiopatológicas de un misma enfermedad son las diferentes realidades de un mismo fenómeno real.
 En El nacimiento de la clínica,  Foucault escribe sobre la manera cómo veían una enfermedad nerviosa dos médicos en distintas épocas. Pomme en el siglo XVIII trató a una paciente histérica con baños de diez a doce horas por día durante diez meses. Luego vio porciones membranosas parecidas a fragmentos de pergamino empapado…desprenderse con dolores y salir diariamente por la orina, desollarse a la vez el uréter  derecho y salir entero por la misma vía. También Pomme  observó como los intestinos se despojaron de su túnica interna y salieron por el recto. La enferma arrojó parte del esófago, la tráquea y la lengua con los vómitos y la expectoración.
 Cien años más tarde, Bayle describió una lesión anatómica del encéfalo y sus envolturas de la siguiente manera: “Su superficie externa aplicada a las aracnoides de la duramáter se adhiere a esta lámina, ora de un modo muy flojo, y entonces se las separa fácilmente, ora de un modo firme e íntimo y, en este caso, algunas veces es muy difícil desprenderlas.”. Luego Bayle habla de las características de las falsas membranas y las compara a las películas albuminosas de los huevos.
 Foucault  compara las observaciones de ambos médicos: la primera está llena de mitos y fantasmas , mientras que la segunda se acerca al conocimiento científico actual. Por eso se pregunta: ¿Quién puede asegurarnos que un médico del siglo XVIII no veía lo que veía, pero que han bastado una decena de años para que las figuras fantásticas se disipen y el espacio liberado deje venir hasta los ojos el corte franco de las cosas?  (6). La respuesta está en la diferencia entre los conceptos de lo real y la realidad, lo que no obstaculiza el desarrollo de la medicina  por cuanto transcurre a través del método de ensayo y error , del que el propio Esculapio, dios de la medicina, tomo en cuenta cuando advierte en sus consejos que “… la medicina es ciencia oscura, a quien los esfuerzos de sus fieles van iluminando de siglo en siglo”.
Cualquier tipo de medicina  no es   más que una  forma derivada de las tres ramas primigenias: la instintiva, la mágico-religiosa y la empírica. Todas reflejan distintas realidades. La más antigua de todas es la instintiva, manifestación inequívoca de nuestra procedencia animal .La medicina instintiva la observamos cuando los animales comen hierbas, tierra y hasta excrementos. Aristóteles supuso un antídoto contenido en el orégano porque notó que las tortugas lo comían cuando devoraban culebras venenosas .La terrofagia, ampliamente practicada por nuestros indígenas y por niños con parasitosis, es un  ejemplo de lo que hablamos. El uso del caolín o arcilla blanca en la farmacología moderna (kaopecón, kaopectate) es parte de la misma opera. Los elefantes, cerdos y muchos otros animales recurren al barro (barroterapia) para proteger su piel. Ese el principio del uso masivo de cremas en dermatología. Los antiguos egipcios vieron como el ibis cuando tenía mucha sed bebía agua colocándola con su pico en el recto. Por esa vía   el líquido vital llega más rápido al torrente sanguíneo : la idea para la invención del supositorio estaba clara; y los egipcios lo inventaron hace cinco mil años sin tener nociones fisiológicas. A la hora de bajarle la fiebre a un niño el supositorio le gana al jarabe.
El investigador y escritor colombiano Humberto Amaya Luzardo vivió más de treinta años en la selva amazónica  donde realizó importantes observaciones sobre la medicina instintiva practicada por los indígenas. En su libro “Bajo el techo de paja” escribió sobre el tratamiento contra las mordeduras de serpiente: “Uno aprende mirando a los bichos. Si usted se pone a mirar a los micos y ve cuando una culebra muerde a un mico, entonces de la ramita que el coja y se eche , échese usted también de la misma. Si no le gusta mirar a los micos…agárrese a mirar a las culebras y de la pajita que ella coma, coja y coma usted también que esa es la que sirve.” (7)
La medicina mágico-religiosa surge asociada a la forma del pensamiento más primitivo: el que se fundamenta en la aceptación  de fuerzas maravillosas responsables de todo lo que sucede en la naturaleza. La enfermedad aparece por magia y la curación también. Fue el eje de la medicina de todos los pueblos antiguos(medicina tradicional china, ayurveda hindú, etc) ; y es el sustento de la hechicería, los milagros de los santos y algunas curaciones espectaculares que no tienen una explicación racional. La autoestima, la fe y las oraciones practicadas por el paciente conforman el ambiente emocional propicio para el restablecimiento de la salud. La medicina mágica, otrora campo exclusivo de los brujos, es ahora materia de investigación en búsqueda de explicaciones que tengan sustratos objetivos y demostrables : la psiconeuroinmunología.
Por último tenemos la medicina empírica, cuya base es la aplicación de una experiencia favorable para la salud: el reposo luego de una fractura , un baño cuando hay fiebre alta o el uso de una planta para determinada enfermedad. La medicina científica es su heredera y en su radio de acción está la práctica clínica, la medicina   experimental y la medicina basada en evidencias.
  En Mesopotamia , hace más de siete mil años, detectaron un problema real: una deidad del mal reinaba cada siete días y por lo tanto los médicos no debían curar durante ese tiempo.  En la actualidad los endocrinólogos han determinado que el nivel de las hormonas de la corteza de las cápsulas suprarrenales oscila  dentro del periodo  semanal lo que determina un biorritmo específico para nuestro organismo y que la sociedad ha refrendado laboralmente. El ritmo sinódico o lunar lo conocían nuestros antepasados más antiguos. Él se manifiesta en dolencias sicosomáticas. Es común oírle al paciente decir: me duele tal parte con el paso de la luna. El comportamiento del loco Juan Carabina es también una demostración de este biorritmo. La luna influye sobre el agua y provoca las mareas. El cuerpo humano contiene hasta 75 % de agua. El mar fue el medio ambiente que propició el origen de la vida. El investigador Gabrilov afirma  que “los elementos de la regulación sanguínea aparecieron cuando surgió el medio ambiente secundario o interno en los organismo multicelulares. Entonces el océano universal se convirtió en el torrente sanguíneo”. (8).He aquí una relación directa entre el macro y el microcosmos.
La medicina lucha contra la muerte, y la muerte es lo real. Asclepio, dios de la medicina, devolvía la vida a los muertos. Hades protestó ante Zeus temeroso que el más allá quedara despoblado. Zeus lo mató de un rayo. El castigo era consecuencia de su transgresión: no le era permitido actuar contra la naturaleza y romper con el binomio real vida-muerte.
 La enfermedad es uno de los medios empleados  por la muerte para materializarse. La enfermedad es real en la medicina mágico-religiosa, pero realidad en la medicina científica, porque al fin y al cabo no es tal, no hay enfermedad, hay enfermos, ya que cada paciente la sufre a su manera no sólo subjetivamente sino en sus procesos patofisiológicos.
Salud, lo contrario de enfermedad, es el estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de enfermedad o dolencia, según la definición presentada por la Organización Mundial de la Salud en su constitución aprobada en 1948. Pero, para muchos expertos, existe la salud, pero no personas con salud total. Alguien saludable es aquel que no ha sido examinado suficientemente. La sicoanalista Karen Horney dijo una vez: no debe  preguntarse si una persona está enferma de una neurosis, la pregunta correcta es cuál neurosis padece. (9).
Cuando Hipócrates, Padre de la Medicina, afirmó en un  aforismo: “La aparición del  espasmo luego de cualquier herida o traumatismo, es mortal”, (10) describió un hecho real, cuya  etiológía sólo fue posibleconocer cuando se describió la neurotoxina del tétanos, causante de los espasmos observados por Hipócrates.
 El medicamento es lo real, su efecto, la realidad, demostrada en la historia de la medicina por el fenómeno del placebo, el cual se define como la sensación de mejoría que experimenta un paciente con un tratamiento falso. Su acción es positiva sólo si el paciente supone su valor curativo.
    Placebo proviene del verbo latino “placere” que significa complacer. En la Edad Media la palabra se refería al lamento de  las plañideras profesionales en los funerales de alguna persona. En el siglo XVIII  ya significaba algo que simulaba un medicamento. La Historia de la Medicina es la historia de los placebos. En China de 2000  medicamentos  sólo la efedrina fue comprobada como efectiva contra la tos en 1920 , y específicamente contra la del asma. La medicina de Mesopotamia usó 265 remedios. En el Papiro de Ebers se nombran 842 prescripciones y 700 remedios.En la India se emplearon 600 remedios. El Corpus Hipocrático menciona 400 drogas. Galeno habla de 820. En la Antigüedad se usaron aproximadamente 4.785 drogas y 17.000 prescripciones, todas placebos, de cuyos efectos positivos no hay duda. Esas fueron las armas terapéuticas de los médicos del pasado. Por otro lado, 30 % de los norteamericanos recurre a las terapias alternativas y el 90 % de las misma se fundamenta en el efecto placebo.
 Aunque se ha dicho que lo real en la actualidad se ha despojado del  misticismo y los  giros metafísicos, lo cierto es que en la medicina lo real sigue siendo mágico, mitológico y religioso. Porque, a quién recurre el paciente sin esperanzas, con una enfermedad incurable, cuando en realidad no hay nada más real que la vida misma.  Lanza su mirada hacia el milagro, el cual no es más, según los conceptos más modernos de la psiconeuroinmunología que la influencia sanadora de las fuerzas y  capacidades desconocidas de la mente humana,  o  la interrelación mente-cuerpo y sus implicaciones clínicas; solo ahora estudiada científicamente y que antes era privilegio y predio del brujo y el chamán, como observamos anteriormente.


FUENTES BIBLIOGRÁFICAS

1.     Diccionario de la Lengua Española. Mateo Cromo. Artes Gráficas, S.A. Madrid ,2001.
2.     Albornoz, J. Diccionario de Filosofía. Gráficas Tao. Valencia, Venezuela,2003.
3.     Rosental, M y Iudin P. Diccionario Filosófico. Editorial Política. La Habana, 1981.
4.     Ferrater Mora,J. Diccionario de Filosofía Abreviado . Editorial Sudamericana. Buenos Aires,  1973.
5.     Lénin, V. Materialismo y empiriocriticismo. Politicheskaia Literatura. Moskva, 1986.
6.     Fucoult, M. El nacimiento de la clínica. Unha arqueología de la mirada médica.México, 1966.
7.     Amaya, U. Bajo el techo de paja.Javegraf. Bogotá,2000.
8.     Gabrilov, O. Problemas e hipótesis sobre la coagulación sanguínea.Meditsina. Moscú.1981.
9.       Eshtein,N. Problemas generales de la práctica terapéutica .Valgus. Talin..1983.


10.  Hipócrates. Aforismos.Editorial Torino.Caracas.2000.